Es inevitable. Si pensamos en transporte de mercancías se nos viene a la cabeza un tráiler transitando por la carretera. Sin embargo, en la actualidad, el transporte por carretera ni es el más utilizado, ni es el más rápido. Aunque cumple una función clave en la logística. El transporte por carretera vive un momento de crecimiento moderado y de incertidumbre. Así es el transporte por carretera en nuestro país a día de hoy.
El 90% de las mercancías que se mueven por el mundo lo hacen por transporte marítimo. Es el transporte más seguro y el más económico. Los grandes buques mercantes transportan miles de containers de una punta a otra del planeta.
En los últimos tiempos ha cogido fuerza el transporte aéreo. El aeropuerto de Zaragoza, probablemente el aeropuerto mercante más importante del España, recibió en noviembre del 2024 un total de 21.091 toneladas. Al mes, salen de este aeropuerto 991 vuelos, de los cuales, 877 son de transporte de mercancías. El transporte por avión permite llevar los envíos de un extremo a otro del planeta en unas pocas horas. Sin embargo, la carestía de este tipo de transporte sigue siendo su principal hándicap.
Los operadores de Transportes Internacionales, una empresa de transporte marítimo de mercancías en Madrid del grupo Star Cargo, que se dedica a gestionar envíos de transporte internacional de mercancías desde 1996, indican que el transporte por carretera se utiliza como complemento del transporte naval, aéreo y en el transporte de última milla.
Lo cierto es que en nuestro país tiene un peso decisivo, ya que con él se hacen envíos internacionales a países vecinos, a veces, en un tiempo menor que con el transporte aéreo.
Veamos la situación concreta del transporte por carretera a día de hoy.
Un escenario complejo.
En términos de toneladas, el transporte por carretera es el responsable de 96% del transporte de mercancías que se realiza en el interior de nuestro país. El transporte ferroviario apenas representa un 4%.
En lo que se refiere a exportaciones a la Unión Europea, el transporte por carretera se encarga del 75% de los envíos. En sectores como la exportación hortofrutícola su papel es decisivo. Es el responsable del transporte del 94% de las exportaciones.
Esto tiene un peso específico importante en la economía, ya que los principales socios comerciales de nuestro país son nuestros vecinos europeos: Alemania, Francia e Inglaterra, aunque ya no esté en la U.E.
El último trimestre del 2024 terminó con un crecimiento del 8% en cuanto al volumen de transporte por carretera. Fue el mejor trimestre de los últimos 10 años. Sin embargo, Ramón Valdivia, vicepresidente de Asociación Internacional de Transporte por Carretera (A.S.T.I.C.) comenta al diario El Canal que la situación del gremio es incierta.
El alto precio del combustible y la inestabilidad del mercado de petróleo, agitada por la guerra de Ucrania y por el conflicto de Gaza en Oriente Medio, hacen que el coste del transporte por carretera haya aumentado. Esto hace que el servicio pierda competitividad.
El transporte español de mercancías se encuentra con un ojo puesto en lo que sucede en Europa. Si bien la Unión Europea prevé un aumento del tráfico de mercancías interno de un 1,7%, lo que se supone que va a beneficiar a las empresas de transporte españolas, también es cierto que la economía de Alemania, el país más rico de Europa, y uno de nuestros principales clientes, está en recesión.
Francia, la otra gran economía europea, ha reducido su actividad industrial. Lo cual influye en el transporte por carretera. Tanto en el flujo de materias primas desde España al país vecino, como en productos elaborados con dirección al mercado nacional.
Tanto a escala nacional como internacional, el transporte atraviesa una situación de inseguridad jurídica. Los continuos cambios en la legislación, tanto europea como española, obligan a las empresas de transporte a adaptarse con rapidez.
Una de las causas de los cambios normativos es la agenda 2030 y, en concreto, los compromisos de las autoridades en materia medioambiental y en la reducción de emisiones de CO₂. En este tema, el transporte por carretera se encuentra en el punto de mira. Algo que afecta a los transportistas mediante la instalación de Zonas de Bajas Emisiones o con las restricciones de tráfico rodado por determinadas rutas.
El transporte de última milla.
Un punto en el que el transporte por carretera ocupa un papel decisivo en la logística es en lo que se conoce como transporte de última milla. Es decir, el traslado de la mercancía desde los almacenes hasta el consumidor final.
En el caso del comercio mayorista, el transporte de última milla se basa en el abastecimiento de las tiendas. Mientras que el comercio minorista a domicilio, cada vez más popular debido al auge del comercio electrónico, consiste en llevar los envíos a la dirección del consumidor final.
Es importante entender que en el transporte de mercancías intervienen diferentes operadores, se utilizan distintos medios de transporte e instalaciones de almacenamiento y logística y que el transporte de última milla es la etapa final.
Se realiza por carretera, bien con camiones o furgonetas, dependiendo del volumen del envío, porque este tipo de transporte permite llegar justo a la puerta del cliente. Esté donde esté.
El blog de la marca de vehículos Toyota señala que en la logística actual, el transporte de última milla desempeña un papel decisivo. Y más en los tiempos actuales, en las que los clientes son cada vez más exigentes.
Quieren que los envíos se realicen en menos tiempo, que se les lleve a una dirección concreta y en un horario determinado.
El economista Jaime Mira Galiana señala que el transporte de última hora es un servicio caro y poco agradecido, pero en un mercado donde las empresas compiten entre sí por la calidad de servicio, ya que los precios están más o menos igualados, prestar atención a la entrega final es lo que permite fidelizar al cliente.
Con el desarrollo del comercio online se ha introducido una nueva variable, el reembolso de la mercancía. Si el cliente no está contento con el producto que ha comprado, lo puede devolver. Esto significa que un producto no está vendido cuando se entrega, sino que hay que esperar a que termine el plazo de devolución. Por lo que todo lo que se haga en pro de conseguir la satisfacción del cliente es decisivo.
El transporte de última milla tiene una serie de retos que afrontar. El primero, y del que ya hemos hablado, es el alto coste del servicio. Otros retos importantes son el seguimiento de las mercancías, el cumplimiento de los plazos de entrega y la digitalización de todo el proceso.
Ventajas del transporte por carretera.
El transporte por carretera tiene una serie de ventajas respecto a otros tipos de transporte, por eso se continúa utilizando. Estas son algunas de ellas:
- Mayor flexibilidad. El transporte por carretera permite llegar a casi cualquier destino, incluidas zonas rurales o alejadas, donde otros medios de transporte no pueden llegar. No depende de infraestructuras como puertos, aeropuertos o estaciones de tren.
- Rapidez en distancias cortas y medias. Para distancias cortas puede llegar a ser más rápido que el avión, ya que la carga no necesita pasar por un proceso de facturación. Al mismo tiempo, no precisa trasbordos como sucede con el transporte marítimo y ferroviario.
- Costes competitivos. Para cargas pequeñas o medianas, el transporte por carretera es más económico que el transporte ferroviario y marítimo, que se amortiza con grandes envíos.
- Entrega puerta a puerta. El camión es el único medio de transporte que puede realizar entregas puerta a puerta, sin necesidad de cambiar de modo de transporte. También requiere menos burocracia en los trámites aduaneros en comparación con el transporte marítimo y aéreo.
- Adaptable a diferentes tipos de mercancías. El transporte por camión permite transportar cargas de diferentes tamaños y características, incluyendo mercancías peligrosas, perecederas o de gran volumen. Todo eso sin contar que se dispone de vehículos especializados como remolques frigoríficos, cisternas o plataformas preparadas para mover objetos de gran tamaño.
- Reducción de tiempos de espera. En comparación con el transporte ferroviario o el marítimo, el transporte por carretera no depende de horarios fijos o frecuencias de salida limitadas. El transportista puede ajustar las rutas en tiempo real en función del tráfico y los imprevistos.
- Mayor competencia y disponibilidad. La gran cantidad de empresas de transporte por carretera permite a las empresas elegir aquel transportista que le resulte más eficaz y se adapte mejor a sus necesidades. Esta variedad propicia que se ofrezcan precios más competitivos y que se presten servicios especiales como el envío exprés o la recogida en un horario especial.
Ya sea como complemento de otros medios de transporte o como transporte principal, el transporte por carretera desempeña un papel importante en la logística y transporte de mercancías en nuestro país.
Dato que se pone de manifiesto con el volumen de su flota, donde existen más de 360.000 camiones que se encargan a diario del transporte nacional e internacional de mercancías.