¿Quién no se ha cruzado alguna vez con un ciclista veterano por la carretera? Y es que el ciclismo tiene algo que engancha, y pese a que pasen los años, siempre está con nosotros. Pero no solo tienes que ser aficionado desde hace años para poder disfrutar de las dos ruedas, este deporte tiene grandes beneficios para la salud que hace que sean muchos los que se apunten a darle a los pedales.
Los estudios así lo confirman. A diferencia de otros ejercicios, el pedaleo es una actividad que demanda poca energía física en el adulto mayor, por lo que se puede realizar durante mucho más tiempo que cualquier otra actividad.
La práctica de ejercicio diario en bici previene o retarda la aparición de enfermedades en todas las edades, especialmente entre los adultos mayores. El ciclismo a esta edad ayuda a reducir síntomas de problemas físicos como hipertensión arterial, asma, artritis y depresión, pero además:
Mejora la circulación y la función pulmonar. Ayuda a mantener las articulaciones en movimiento y fortalece la musculatura de las piernas, brazos y columna. Se puede realizar en compañía de otros ciclistas y esto favorece la vitalidad.
Ciertos parámetros fisiológicos comienzan a declinar efectivamente a medida que envejecemos: VO2 max (la capacidad aeróbica; esa habilidad para transportar y usar el oxígeno durante el ejercicio), pero al mismo tiempo se mantienen ciertas características como la densidad capilar y enzimas oxidantes se convierten en verdaderos sustitutos de aquello que perdemos. Esto hace posible contrarrestar esa disminución en un grado mucho mayor si es que no nos convertimos en unos sedentarios. Aquí tienes el ejemplo de unos buenos deportistas aficionados al ciclismo.
A partir de los 45 años es muy importante que se evalúe el estado de salud general para asegurarse de que cualquier plan de ejercicios es adecuado. Finalmente, hay que recordar que la práctica de bicicleta estática sustituye perfectamente al ciclismo y no hay que dudar en emplearlo en aquellas personas con limitaciones del movimiento. Además es un deporte que puedes encontrar en cualquier residencia. Por ejemplo, en las Residencias Acomodare son conscientes de sus beneficios y ponen a disposición de sus clientes, todo tipo de detalles para poder practicar el ciclismo, ya sea en sus jardines o en el interior en sus gimnasios.
Los adultos mayores que practican el ciclismo son prueba fiel de la nobleza de esta actividad y podrán disfrutar de una mejor vida. Y tú, ¿te animas a darle a los pedales?