Te lo dicen en todos los sitios, “es muy bueno andar en bici”, pero la verdad es que hasta que no lo pruebas no eres consciente de ello. Yo desde siempre era de la de ir a todos los sitios en coche o en autobús. Pero el año pasado me traslade a Cataluña para comenzar a estudiar en Escuela de Estudios Superiores y Universitarios Formatic Barcelona, que se trata esta escuela de turismo de Barcelona, y mi vida, como es lógico, cambió por completo.
Esta escuela está ubicada en pleno Paseo de Gracia con más de 2500 metros cuadrados de instalaciones equipados con los medios y recursos docentes más modernos y divididos en dos edificios a ambos lados del paseo de Gracia. Es decir, que la situación de la Escuela, en el centro neurálgico de la ciudad y con excelentes comunicaciones ofrece al estudiante la facilidad de acudir a las clases en poco tiempo, pero claro, no iba a utilizar el coche, por lo tanto aposté por la bicicleta, y la verdad es que es una gozada. No me extraña que sea un negocio que esté en auge.
- Me siento mucho mejor. Lo primero físicamente, porque he perdido 3 kilos, y ya me he olvidado de las famosas operaciones bikinis de meses previos al verano. Además he fortalecido mis piernas y mi culete. Vamos que ya no hace falta que vaya al gimnasio porque lo tengo en mi bicicleta, y mucho más barato.
- Entre otras cosas porque al pedalear aumenta el ritmo cardíaco y se reduce la presión arterial. Es capaz de reducir a la mitad el riesgo de infarto. Al mover las piernas mejora la circulación y la flexibilidad de los vasos sanguíneos. Además reduces el colesterol malo y aumenta el bueno, que era algo que me tenía preocupada porque en los análisis siempre me salía la estrellita.
- Otra cosa que he notado es que mi espalda está mucho mejor. Pero para ello, es muy importante mantener una buena postura manteniendo el dorso ligeramente inclinado hacia delante. Al pedalear se activan los músculos de las vértebras dorsales. Conviene realizar ejercicios de abdominales para ello, cuando pedalees haz encogimientos de piernas.
- Ni hablar de su capacidad para liberar el estrés y las tensiones y es que al andar en bicicleta tienes la capacidad de meditar y de algún modo dejar los problemas atrás, al menos por un momento. Yo era un persona muy nerviosa, que siempre estaba en tensión, y desde que hago bicicleta me siento mucho más tranquila. Los días más tensos aprovecho para quemarlo todo en la bicicleta, eso sí, mucho cuidado con el tráfico que bien cierto es que en Barcelona no es fácil.
- En definitiva, el cuerpo segrega hormonas, endorfinas y serotoninas, que nos hacen sentir mejor y más felices por lo que el ejercicio es perfecto para combatir depresiones o trastornos psicológicos. El cerebro se oxigena y funciona con más rapidez y claridad. Vamos que solo con decir que he aprobado todo durante este curso, está todo dicho.
Así pues, os recomiendo que para ir a la universidad, al trabajo o cualquier cosa uséis la bicicleta, porque vuestro cuerpo os lo va a agradecer. Además, en una ciudad como Barcelona, donde la contaminación es cada vez mayor, vendrá muy bien para el medio ambiente y poder respirar mejor.