El Annapurna es conocido por ser una de las montañas más altas del Himalaya. Para algunos es el Ocho mil más peligroso del mundo. Mide 55 kilómetros de longitud y tiene hasta seis picos por encima de los 7.000 metros de altura. Pues bien, a veces en la vida cometes locuras, esas locuras que comienzan un día como una chorrada. Yo recuerdo que la nuestra fue durante una salida en Semana Santa en bici por Córdoba, y finalmente se acabó convirtiendo en toda una aventura. Pues algo así nos ocurrió a mi grupo de amigos, el día que decidimos viajar hasta allí. Pero nosotros, no haríamos la ruta andando, no. Nosotros vamos más allá y la hicimos en bicicleta. Y es que.. ¿qué aficionado de las dos ruedas nos podemos resistir a subir un puerto de 5.416 metros?
Tengo que reconocer que el recorrido es difícil, ya que incluye tramos en los que no se puede circular sobre la bici, yo diría que sería alrededor de un 20 %, pero en realidad se trata de una travesía de hike-a-bike, que combina el ciclismo y trekking, como la mayor parte del ascenso a Thorung La, en el que hay que bajarse del sillín. Para muchos, esta dificultad añadida enriquece aún más la experiencia, sobre todo cuando el 80% del circuito que se cubre pedaleando es, sencillamente, fascinante.
Para realizar rutas de este tipo en bicicleta es importante contar con un fondo físico tremendo, pero también recomiendo que se tengan en cuenta otras cosillas. Por ejemplo contactar con este traductor jurado que os pueda gestionar papeles y realizar papeleos. No es una zona fácil de acceder y normalmente te suelen pedir muchos datos y documentación y tiene que ir traducida y en su idioma.
La ruta
A nosotros nos lo gestionaron desde una agencia, ya que son cada vez más las que ofrecen viajes para realizar el circuito del Annapurna en bicicleta. Recuerdo que todo comenzó en Besi Sahar, adonde se puede llegar en autobús desde Katmandú (seis horas) o Pokhara (cinco horas). Desde el final del circuito, en Naya Pul, el regreso en bus a Pokhara lleva unas dos horas, aunque si quedan fuerzas se puede ir en bicicleta por caminos secundarios.
Empezamos en bicicleta desde los campos de arroz de tierras bajas, cada vez íbamos ganando altura a medida que pasan a través de bosques de robles y pinos que eventualmente dan paso a la zona desértica de alta en Manang (3579m). El descenso fue lo más llamativo, con carreteras impresionantes y con mucha pendiente.
Hasta hace unos años el trekking del Annapurna era uno de los más importantes de Nepal. Sin embargo, ha perdido parte de su atractivo a causa de las nuevas carreteras que recorren sus valles. En su lugar hemos llegado los ciclistas, seducidos por la posibilidad de pedalear sobre uno de los circuitos más famosos del planeta y la poco habitual oportunidad de practicar nuestro deporte a una altitud de 5.416 m en Thorung. Es algo que nunca podrá olvidar.
Como puedes comprobar tiene una pinta increíble, es una de esas experiencias que si estás preparado físicamente y mentalmente la recomiendo al 100%. Por supuesto que a los principiantes y a los amigos del postureo, es decir, ir para hacerse una foto y colgarla en las redes sociales que no se lo recomiendo, es más, se lo prohíbo.